viernes, 30 de abril de 2010

Unas palabras para Suiza






Sinceramente no creo que estas lineas lleguen a los ojos de quien las tiene que leer ni a quien van dedicadas,pero la esperanza es lo ultimo que se pierde.
Tengo en mi cabeza muchas cosas que agradecer a aquella inolvidable experiencia y que esta noche,no se porque,siento tan presente.
Aquella etapa de mi vida que me cambio,aquella etapa que me sirvió para aclararme,despejarme,olvidarme de todas las cosas por las que un día con la ayuda de mi mejor amigo Pablo,decidí salir corriendo de todo,sentía que me ahogaba,que me hundía y que junto a mi podría hundir a mucha gente y era algo que no quería que ocurriera.
Necesitaba escaparme de muchas penas que habían pasado recientemente y en muy poco tiempo,casi sin dar tiempo a reponerse de una...venia otra.
Sin duda la que mas me marco fue la muerte de mi padre,un golpe duro,si leéis MI ESPEJO os podáis hacer una idea de lo que era para mi,supongo que para todo el mundo significa lo mismo un padre.
Y me salio esta oportunidad,para mi una puerta de salida,una vía de escape,que aunque me digan lo contrario par mi,siempre fue una cobarde huida,aunque la necesitase.
Y allí me fui a explorar que había al otro lado de esa puerta,que había tras 21 horas en autobús,en donde tras pasar dos horas solo por aquella estación de autobús de Ginebra,sin móvil que funcionara,sin tarjeta para la cabina telefónica que no funcionaban con monedas,sin nadie que hablara mi idioma en los alrededores,me dio por pensar en que locura había cometido y creerme que fueron dos horas eternas llenas de altibajos emocionales bufff hasta que vi llegar a Pablo y mi cara cambio y mis miedos se largaron en el autobús que en aquellos momentos abandonaba la estación y mi serenidad regresaba mientras resolvía un café au lait en una de las lujosas cafeterías de aquella ciudad.
Unas horas mas tarde conocería el lugar en que viviría,el sitio donde trabajaría,quien me iba a decir a mi que acataría en la cocina de un club de golf,un suizo,un francés,un canadiense y dos españoles,suena tan.....de chiste.
Y debo de agradecerles a Pablo y familia,a los Kaisser,el haberme dado la oportunidad de un trabajo,de conocer una nueva cultura,un nuevo idioma y todas las molestias que se tomaron en hacerse entender,en el trato que me dispensaron,solo tengo palabras tan bonitas y llenas de agradecimiento que no sabría transcribirlas.
Solo espero haberles podido devolver toda esa confianza que depositaron en mi y a veces siento pena de no haberme podido comunicarme mas con ellos por aquello del idioma,bueno vale,a veces disimulaba como que no entendía,pero eso eran gajes del oficio y seria otra historia.
No suelo escribir nada así,ni siquiera se la razón por la que lo hago en estos momentos,solo se que me invadía la necesidad de contarlo por si algún día,quien sabe,lo leen.
Gracias suiza,merci a tous,a la prochaine
P.D:tengo que volver un día a la fiesta de la vendimia y disculpadme todos por esta ida de olla que acabo de tener

2 comentarios:

  1. jeje disculpado quedas siempre me encanta cuando alguien cuenta algun viaje..es una manera de "viajar sin papeles"..aunque sea por una necesidad tan triste como la que cuentas...carga las pilas y, la vida sigue..here and now

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  2. es como un viaje en el espejo tambien jeje

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