miércoles, 10 de noviembre de 2010

El exiliado



Cuando me usaron cual trapo
haciéndome ir dando tumbos
convertido en un sucio harapo
sesgando mis posibles rumbos,
cuando me lanzaban piedras
y nunca lo hacían de frente,
en mi vida crecían solo hiedras
bajo su risa terca e insolente.
Cuando mas me costaba pagar
el precio por estar a su lado
mas daño me solían regalar
desmoronando mi tejado
y allí vi romperse la promesa,
no se cumplió nada de lo pactado
y dando un golpe sobre la mesa
recogí los trozos que habían quedado
de las esperanzas de libertad,
de sueños que me habían contado
que ellos faltando a la verdad
sin darme cuenta me habían robado
y pensé que tenía que marcharme,
que aquelo no tenía remedio,
decidí voluntariamente exiliarme
y poner tierra de por medio
para seguir vivo entre los cuerdos
enseñando al mundo nuestra historia
les contaría todos mis recuerdos
que guardaba en mi memoria
y hacia otro lugar tuve que partir
para no sufrir mas como un perro,
donde pudiera comenzar a escribir
estas memorias de un destierro

Esta es mi primera colaboración en el blog memorias de un destierro,el cual os recomiendo,podeis encontrar cosas muy interesantes,desde aquí os invito a que lo visiteis...





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