martes, 4 de octubre de 2011

Hasta que me duelan las manos


Está ese cochino despertar
que sobre mi revoloteó,
tan difícil de esquivar
que a mi lado se instaló
y hoy te vengo a contar
lo que jamás conté
que me hace deleznar
todo cuanto creé....
Se va la última voz para cantar
la que quiso ser y no fué,
la que se quiso silenciar,
la que en cueros dejé,
la que se pone a pensar
en que no va a poder
ser lo que se podía esperar
de todo lo que pudo ser,
se quiso levantar
y al suelo se cayó,
se comenzó a arrastrar
y se resquebrajó.
Déjame que sienta en las manos
el poder de todo lo que pueda doler,
que se lo comerán los gusanos
antes de que me vean desfallecer,
vendrán las fauces que quise morder
y que nunca pude atrapar,
duelo a muerte al alborecer
bonita forma de terminar
y enjaular la razón
a golpe de talón
que de negro teñirá este corazón,
aún me queda por luchar,
tengo que pelear
para que haya una continuación,
que no termine mal
a golpe de puñal
esa será mi única motivación.
Hasta que me duelan las manos viviré
cosiendo heridas con el mismo cordel,
hasta que no quede sangre sufriré,
si fallan las mías,a las tuyas me cogeré

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